Seguramente si estás leyendo este artículo es porque hace poco que tu pareja te ha dejado o quizás has sido tú quien ha decidido dejar la relación sentimental o quizás te lo estés planteando pero la inseguridad y el miedo te paralizan y te hacen seguir en una relación que no te hace feliz. En cualquiera de los casos entiendo por lo que estás pasando pero tranquil@ y respira, a diario hay parejas que rompen, no es algo excepcional, es algo muy normal hoy en día.
No importa cuanto tiempo haya durado la relación y como haya sido la ruptura, más o menos traumática o dolorosa; el proceso puede ser complicado y más o menos traumático, pero tengo una buena noticia, eso pasará con el paso del tiempo y quedará guardada en tu mochila de la vida, serás capaz de recordarlo sin dolor y lo verás como una oportunidad de aprendizaje y crecimiento.
Cuando una relación termina vivimos un duelo, lo mismo sucede cuando perdemos un ser querido, necesitamos hacernos a la idea de que las cosas han cambiado, nuestra mente necesita asimilar y afrontar que la otra persona ya no está en nuestra vida. Tenemos que permitirnos sentir las emociones de una de las etapas. Cuando se produce una ruptura, lo normal y habitual es pasar por las diferentes etapas del duelo (negación, ira, negociación, depresión y aceptación) pero es importante que no nos quedemos estancados en ninguna de las etapas ya que esto puede suponer un gran bloqueo emocional y sería necesario pedir ayuda a un profesional.
Conocer las fases que estás viviendo te ayudará, a identificar y entender el proceso por el que estás pasando:
  1. Negación: Esta es la primera etapa y el comienzo. Te negarás a aceptar que la relación se haya acabado, incluso no te lo creerás, te sentirás triste. Te repetirás frases como: “Esto no me puede estar pasando”, “no es verdad, no puede ser”, “no me lo puedo creer”.
  2. Ira: Una vez que hemos asimilado la situación el dolor se transforma en ira, empezamos a creer que hemos sido tratad@s de forma injusta y/o que nos han traicionado, engañado. En esta fase suele haber sentimientos de tristeza profunda y también podría haber ansiedad y agresividad. La manera de expresarlo en esta fase es: “¿!Cómo me has hecho esto?! Te odio”
  3. Negociación: En esta tercera etapa intentamos buscar algún tipo de solución a esta situación de ruptura e intentar que la situación cambie. En este punto se actúa de forma impulsiva, forzando encuentros, haciendo llamadas, enviando mensajes,…que no suelen conseguir el objetivo deseado.
  4. Depresión: Llegado a este punto, empezarás a entender todo lo sucedido, comprenderás que la relación ha terminado y que no volveréis a estar juntos. En esta fase te sentirás muy triste, sin ganas de salir, desganad@ y sin esperanza.
  5. Aceptación: Última etapa. Aquí vas recuperando tus fuerzas y ya no tienes tantos pensamientos negativos. Aceptas que terminaste con tu pareja. Los recuerdos ya no te causan tanto sufrimiento y hablas con normalidad de tu relación pasada y tu ex.

 

Si estás pasando por un proceso de ruptura, es comprensible como te sientes y tienes que darte el permiso a estar mal y sacar todos los sentimientos de negación e ira, pero no te quedes ahí, piensa que es un camino y que tienes que avanzar, céntrate en ti mism@ y lo que es bueno para ti.