En los últimos meses me he dado cuenta que la sociedad en general, está apagada y aburrida ¿lo has notado? o ¿te pasa a ti?

La pandemia nos tuvo con nuestro sistema de alarma activado durante muchos meses, encendiendo así nuestro sistema de huida. Pasados unos meses la situación fue mejorando, pero lejos de lo que pensábamos la pandemia se está alargando.

Esta situación ha provocado que muchas personas se sientan con falta de alegría, sin rumbo, aburridos; según el sociólogo Corey Keyes, este sentimiento se denomina «languishing», languidecer.

Durante la pandemia la salud mental ha sido la gran olvidada y ahora ese olvido está trayendo consecuencias.

Tener este sentimiento de languidez, no es estar deprimido, es el espacio que hay entre la depresión y el bienestar.

Recuerdo que un amigo el otro día me decía: «los psicólogos le ponéis nombre a todo» y es cierto, ya que una estrategia para gestionar las emociones es ponerle nombre.

Los principales síntomas de la languidez son:

  1. No disfrutas de nada y nada te motiva
  2. Sientes que no eres tú, no te reconoces
  3. Estás agotad@ mentalmente

Identificar y ponerle nombre a cómo te sientes ya es una gran paso; estos tres pequeños consejos pueden ayudarte a que te sientas mejor.

  • Para y coge tiempo libre para ti.
  • Date el permiso de disfrutar
  • Cambia de ambiente

🌟 Si ya has probado estas cosas y te sientes igual, te recomiendo que le eches un vistazo a este curso, en el que podrás entender cómo funciona tu mente, y poner luz a ese sentimiento de languidez que sientes.