Una de las cosas más bonitas que hacemos en consulta y en los talleres es cuando trabajamos la niña interior.

La niña interior es una metáfora que utilizamos en psicología y se utiliza para referirnos a la niña o niño que todos tenemos dentro. En el ámbito de la psicología dividimos la mente en dos partes la primera es nuestra niña interior y es esa parte más vulnerable, más tierna, más infantil esta parte nos conecta con nuestra niña verdadera. Y por otro lado está la parte del “padre crítico” esa mente más crítica y que nos juzga.

¿Sabes de dónde vienen los complejos? Los complejos vienen del niño, nunca del adulto, cuando nacemos somos seres puros y con una esencia auténtica, pero a medida que vamos creciendo vamos añadiendo capas, patrones  y tapando esa esencia, eso que nos hace únicos. Lo hacemos para sentirnos amados y encajar con lo que se supone que los adultos quieren de nosotros como niños. Este proceso no es más que un proceso de supervivencia pero nos hace perder nuestra pureza y nuestra esencia.

Durante nuestro primer septenio (primeros 7 años de vida) vivimos una serie de experiencias que hace que vayamos adoptando unas creencias, patrones y programas de nuestros padres, y que por lo tanto, no nos corresponden. Estas experiencias regulan nuestro día a día en nuestra vida adulta, desde lo más profundo del inconsciente.

La niña interior está directamente relacionada con la autoestima por eso es tan importante trabajarla de una forma profunda para conseguir resultados durareros. Cuando decimos que una persona tiene una baja autoestima, no estamos hablando únicamente de la imagen física, la autoestima es algo más profundo, tener una alta autoestima, significa hablarte con respeto, creerte capaz de que puedes conseguir cualquier reto que te propongas, significa no autoboicotearte en tus relaciones, y podría seguir con muchos más ejemplos,…

La metodología de Piropos al alma incluye el trabajo profundo de la niña interior. Por eso siempre la trabajo en consulta y en los talleres online, forma parte de mi metodología y los resultados una vez se trabaja, son maravillosos. Sanar esa parte de tu vida te permite conectar con ella, con tu esencia más pura, ya que un problema que se manifiesta en la vida adulta puede que esté conectado con alguna situación que viviste de niña y que en ese momento no supo entender, no supo gestionar y seguramente ahora te esté provocando situaciones de autoexigencia, ansiedad y problemas en tus relaciones de pareja. Por eso debemos conectar con tu niña interior acogerla, abrazarla y empoderarla como la mujer que eres ahora y darle muchísimo amor.

¿Y tú, sientes que tienes que reconciliarte y conectar con tu niña interior?

 

Sana tu niña interior para empoderar la mujer adulta que ahora eres.